Se encarga de regular las relaciones jurídicas entre personas, tanto físicas como jurídicas. En esta rama se trabaja principalmente en:
● Reclamaciones de cantidad y deudas
● Contratos civiles (compraventas, arrendamientos, préstamos, etc.)
● Responsabilidad civil (accidentes, negligencias, daños y perjuicios)
● Herencias y testamentos
● Derecho de familia (divorcios, custodias, pensiones, régimen de visitas)
Regula las actividades comerciales y empresariales. Es clave para autónomos, pymes y sociedades. Incluye:
● Constitución y asesoramiento a empresas y sociedades
● Redacción y revisión de contratos mercantiles
● Conflictos entre socios
● Responsabilidad de administradores
● Concursos de acreedores y reestructuraciones empresariales
● Protección de marcas y propiedad industrial
Se centra en la defensa o acusación en procesos donde se investigan delitos. Las funciones incluyen:
● Defensa penal ante denuncias o querellas
● Acusación particular para víctimas de delitos
● Asistencia en comisaría y juzgados
● Delitos contra el patrimonio (robos, estafas, daños)
● Delitos contra las personas (lesiones, amenazas, violencia de género)
● Delitos económicos y societarios
Regula la relación entre los ciudadanos y las administraciones públicas. En esta área se trabaja en:
● Recursos frente a sanciones administrativas (multas, licencias, etc.)
● Reclamaciones por responsabilidad patrimonial de la administración
● Urbanismo y ordenación del territorio
● Procedimientos contencioso-administrativos
● Ayudas, subvenciones y procedimientos públicos